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Dunas de Formentera: Un refugio balear en conexión con la naturaleza y el mar

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Cuando abra sus puertas en mayo, Dunas de Formentera traerá a la isla un refugio apartado y tranquilo, que formará parte de la cartera de hoteles singulares de Marugal Hotel Management en España, Francia, Portugal y Suiza. En palabras de Pablo Carrington, director general de Marugal: «Queríamos que Dunas de Formentera fuera uno de esos lugares en los que te quitas los zapatos nada más llegar y no te los vuelves a poner hasta que te vas…».

Situado entre las dunas de la playa de Migjorn, de 5 km de longitud, y con sólo 45 habitaciones, los elegantes interiores del hotel han sido diseñados por el estudio palmesano Antonio Obrador, cuyo trabajo adorna otros hoteles de gran prestigio de la cartera de Marugal, como Cap Rocat, en Mallorca; Gecko, también en Formentera; Palacio Solecio, en el casco antiguo de Málaga; y Urso Hotel, en Madrid, así como muchos otros hoteles de todo el mundo.

Una de las fuerzas motrices de todos los hoteles Marugal es el respeto por el medio ambiente y el uso de lo que ya existe, y Dunas de Formentera no será diferente. Antonio Obrador y su equipo han tomado un pequeño hotel establecido y han hecho magia para transformarlo para el viajero de hoy.

Las amplias habitaciones y suites, algunas situadas en el edificio principal y otras en bungalows privados, están conectadas por caminos y pasarelas a través de las dunas. Han sido diseñadas pensando en los amigos y la familia, y algunas son lo suficientemente grandes como para añadir camas para niños. Serán algunas de las habitaciones más grandes de Formentera, con hasta 60 m2, y todas ellas increíblemente privadas.

En el interior, el hotel refleja a la perfección su exterior, con una paleta de colores arenosos y blanquecinos que reflejan el sol y la luz natural. 

El yute, la lujosa ropa de cama, la terracota, el estuco, la madera, las celosías de cerámica y el suelo continuo proporcionan una sensación de intimidad sin complicaciones ni esfuerzo y de auténtica evasión.

Además de estar a un paso de la playa, Dunas de Formentera contará con una gran piscina infinita con impresionantes vistas al mar.  De hecho, en este refugio especial, el mar Mediterráneo está siempre a la vista, con el aroma del enebro silvestre flotando a través de la brisa marina…

Gastronomía con sello mediterráneo

En el restaurante, abierto todo el día, el menú contará con ingredientes autóctonos de la tierra y el mar: el pescado más fresco cocinado al fuego, sencillamente maridado con productos mediterráneos, que cambiarán a diario en función de la pesca del día y los matices de temporada.

Tampoco faltarán las delicias cocinadas a la brasa y las «cocas» típicas de la zona, recién salidas del horno de leña, que se convertirán, sin duda, en uno de los platos favoritos del restaurante.

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