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Posada Real de las Misas, en Puebla de Sanabria (Zamora)

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En una de nuestras últimas visitas a Sanabria tuve la suerte de visitar y hospedarme en la Posada Real de las Misas, en Puebla de Sanabria (Zamora), reconocido como uno de los Pueblos Más Bonitos de España. Digo suerte porque lo más normal es que esté completo, sobre todo en ciertas épocas el año, como en verano, por lo que es recomendable reservar con el tiempo suficiente.

Vistas del entorno bañadas por el río Tera, desde el Palacio de las Misas

Las Posadas Reales son establecimientos rurales cuya oferta es un ejemplo de servicio basado en la excelencia turística. Deben cumplir con una serie de requisitos para ser reconocidas como tales en Castilla y León. Todas están situadas en pueblos con valor histórico-monumental o en parajes naturales de gran belleza, y su arquitectura tradicional se integra perfectamente en su entorno. Cuidan su decoración hasta el último detalle, ofreciendo a los huéspedes calidad en las prestaciones, calidez en el trato, contacto directo con la naturaleza y estancia en un alojamiento con especial encanto y carácter. La Autoridad Turística Regional, vela cada año por el cumplimiento de los requisitos de la Marca y trabaja para la mejora continua, garantía de la satisfacción de los huéspedes y del fomento de una oferta de turismo rural de calidad en Castilla y León. 

La Posada de las Misas dispone de 14 habitaciones con cuartos de baño completamente equipados. La forma del edificio da lugar a que todas sean diferentes, disponiendo de maravillosas vistas a la Plaza Mayor, a las montañas, al Río Tera, a la Iglesia de Nuestra señora de Azogue y al Castillo. Los contrastes entre la tradición y la modernidad, la piedra y la madera, el vidrio y el acero son la referencia de todos los espacios. El mobiliario ha sido pensado para cada una de las habitaciones con el propósito de que “cuenten historias” y para ello se han elegido algunos muebles tradicionales y otros de los más importantes diseñadores del siglo XX. En las paredes cuelgan dibujos de viajes de distintos artistas.

El edificio consta de espacios de estar, distribuidos en cada una de las plantas, además de restaurante y bar en la planta baja (con acceso directo desde la calle), con un gran ventanal y terraza, donde disfrutar de las sorprendentes vistas del entorno bañadas por el río Tera, mientas se disfruta de la gastronomía local .

La casa original fue construida en el siglo XV, en la parte más alta, donde se asentaron las primeras edificaciones en torno a la primera fortaleza medieval y ha sido objeto de varias transformaciones. Está situada junto al Castillo de los Condes de Benavente (S.XV), a la Iglesia románica de Santa María del Azogue (S.XII al XX), al Ayuntamiento renacentista (S.XV) y a la capilla barroca de San Cayetano (S.XVIII). 

En 1766 la casa ya figuraba en los planos de defensa de la Plaza de la Puebla, en 1789 en el plano levantado por Antonio Durantez, y en el 1800 en el de Zamoranegui. Fue a finales del siglo XX cuando fue adquirida por los actuales propietarios quienes, años después, llevaron a cabo su completa reconversión en posada de viajeros.

El estado actual es el resultado de una gran reforma que buscaba la adaptación del edificio para su conversión en posada de viajeros y fue proyectada y dirigida por el estudio de arquitectura Francisco Somoza, quien también se ha encargado de la decoración y el amueblamiento de los espacios interiores.

La dirección gastronómica está firmada por Mónica Fernández cocinera sanabresa que ha sabido conjugar a la perfección la cocina tradicional sanabresa y zamorana, con guiños y toques de vanguardia, ofreciendo una excelente experiencia gastronómica a los comensales. Un espacio muy actual y acogedor, con una brillante puesta en escena de la gastronomía basada en los mejores productos de cercanía y la provincia zamorana, donde no faltan la ternera sanabresa, quesos zamoranos, habones de Sanabria, bacalao confitado o el pulpo a la sanabresa son solo algunos de los suculentas propuestas que podemos degustar. La bodega prioriza los afamados vinos de la tierra para armonizar los platos, como los vinos de Toro, Valles de Benavente, de la Sierra de la Culebra o el vermut zamorano Bendita Locura.

Después de hospedarme allí, solo os puedo decir que cada rincón sorprende, integrando decoración tradicional con elementos modernos de una forma natural. Perfecta para perderse un fin de semana.

Para conocer mejor La Posada de las Misas entra en: https://www.posadadelasmisas.es/

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