Un restaurante clásico de la gastronomía asiática en Madrid
El restaurante, situado en el exclusivo complejo del Hotel Rosewood Villa Magna, con una entrada independiente por la calle Marqués de Villamagna, el emblemático restaurante chino Tse Yang conmemora su 28º aniversario. Este icónico establecimiento de alta cocina asiática ha sabido mantenerse en la cima gracias a su propuesta culinaria única, su filosofía de máxima calidad y una puesta en escena impecable, complementada por una espectacular terraza. A lo largo de casi tres décadas, Tse Yang ha sido un símbolo de elegancia y buen gusto en la capital.
Los platos que han marcado su identidad siguen siendo protagonistas en la carta: dim sum gourmet, mushi de langosta, lubina al vapor, buey al estilo Sichuan, y, por supuesto, su aclamado pato laqueado. Estos son los grandes éxitos de un menú que combina lo mejor de la China Imperial con las últimas tendencias culinarias.
Elevando la cocina asiática desde los años 90
En los años 90, la oferta de gastronomía asiática en Madrid era muy limitada. Lo más común en los restaurantes chinos de la ciudad eran propuestas sencillas como el arroz tres delicias. En ese contexto, Tse Yang rompió moldes cuando abrió sus puertas en 1996, ofreciendo una experiencia culinaria totalmente diferente. Con un enfoque basado en la alta gastronomía, este restaurante trajo consigo una visión de la cocina china sofisticada y de calidad, algo que no se había visto antes en la capital.
El restaurante Tse Yang, ubicado originalmente en el Villa Magna, se destacó no solo por su cocina, sino también por su decoración refinada, lejos de los típicos estereotipos asociados a los restaurantes chinos. Desde el principio, su objetivo fue combinar los sabores tradicionales chinos con los estándares de lujo europeos. Esta mezcla de culturas y la atención al detalle hicieron de Tse Yang un referente indiscutible en la alta cocina.
Un espacio renovado pero fiel a su esencia
A lo largo de los años, Tse Yang ha sabido adaptarse a las nuevas tendencias sin perder su esencia. Desde hace cuatro años, el restaurante cuenta con un nuevo local, que se mantiene fiel a su concepto original pero con un toque moderno. Con una entrada independiente por la calle Marqués de Villamagna, este espacio es más amplio y acorde a las demandas actuales del lujo.
El diseño, a cargo del estudio barcelonés Alfons & Damian, sigue manteniendo el ambiente sobrio y elegante del primer Tse Yang. La combinación de materiales naturales, como la piedra y la madera, con elementos contemporáneos, como el cristal negro decorado en pan de oro, logra una atmósfera sofisticada. Además, el restaurante dispone de una terraza para 40 comensales, rodeada de vegetación, que invita a disfrutar de una experiencia gastronómica en un entorno sereno y acogedor.
El regreso de los maestros originales
Una de las claves del éxito continuo de Tse Yang ha sido su equipo. Entre ellos, destaca el regreso del chef Pablo Kim, discípulo del chef fundador, quien tras su paso por Tse Yang en Ginebra ha vuelto para seguir elevando la calidad de la cocina del restaurante. Además, la cocinera que elaboraba los famosos dim sum gourmet cuando el restaurante abrió sus puertas en 1996 también forma parte del equipo actual.
En sala, la atención al detalle sigue siendo un sello distintivo de Tse Yang. Sergio Ortiz, uno de los primeros maîtres del restaurante, y Lucía Fan, con una larga trayectoria en el grupo, garantizan que el servicio sea impecable. Muchas de las preparaciones se terminan frente al comensal, añadiendo un toque teatral y exclusivo a la experiencia gastronómica.
Una carta atemporal y sofisticada
La oferta culinaria de Tse Yang ha sabido mantenerse a lo largo de los años, con platos que nunca pasan de moda. Su cocina es como un clásico de la alta costura: elegante y atemporal, con un toque contemporáneo que la hace atractiva en cualquier ocasión. Lucía Fan, directora de sala, explica que muchos de los clientes que pedían los mismos platos hace 28 años, ahora son sus hijos quienes los reclaman.
Entre las especialidades más populares se encuentran los dim sum en diversas variantes, como los de cerdo con mostaza, langostino, txangurro, pato con foie, y trufa blanca con shiitake. Además, destacan platos como el mushi de langosta, la lubina al vapor, las vieiras al jengibre, el buey caramelizado, y, por supuesto, el pato laqueado a la pekinesa, una de las estrellas de la casa, que se trincha y se sirve frente al comensal.
Un maridaje perfecto con vinos exclusivos
La bodega de Tse Yang complementa su oferta gastronómica con una selección de cerca de 100 referencias, que incluyen vinos de todas las denominaciones de origen de España y etiquetas exclusivas de productores internacionales. La carta es versátil, equilibrada y diseñada para acompañar los distintos sabores de la cocina china. La selección de espumosos, tanto cavas como champagnes, es especialmente destacada, ideal para armonizar con los sabores refinados de Tse Yang.
Con tres menús degustación que varían entre los 65 y los 88 euros, Tse Yang sigue ofreciendo una de las mejores experiencias de alta cocina china en Madrid, manteniéndose fiel a su compromiso de calidad y excelencia tras 28 años de éxito.
Dirección: Calle del Marqués de Villamagna, 1
Teléfono: 914 311 888 – 914 311 818
Horario: de lunes a domingo, de 13:00 a 16:00 h y de 20:00 a 00:00 h
Precio medio: 60-80 €