Teníamos ganas de volver a la casa de Rubén y Miriam Hernández, La Casa del Pregonero en Chinchón, la casa donde vivió el último pregonero de Chinchón. Siempre es un acierto como experiencia gastro y los 45 km de distancia que tenemos desde Madrid, por la A3, hace que el viaje sea rápido y cómodo.
Siempre apoyando los productos de proximidad de la zona, como el anís, el aceite o el vino, Miriam trabaja desde 2017 en el proyecto de recuperación del ajo fino de Chinchón, en colaboración con el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA). Es por ello que cocina con alma chinchoneta y eso se nota en todos su platos.
Chinchón es uno de los destinos más conocidos a nivel regional y nacional por su gran variedad de atractivos culturales y turísticos. Es reconocido como uno de los Pueblos más Bonitos de España, y su casco urbano declarado Conjunto Histórico Artístico, en 1974. Destaca su gran Plaza Mayor, de origen medieval, llena de vida y actividades con sus más de 200 balcones verdes, es declarada la 4ª maravilla material de la Comunidad de Madrid.
Durante el mes de agosto se celebran las fiestas patronales y la Plaza Mayor se convierte en una plaza de toros. En febrero la Plaza Mayor se transforma en su famoso mercado medieval.
La Casa del Pregonero propone un disfrute gastronómico de altura, en la Plaza Mayor de Chinchón, de ello se encargan los hermanos Rubén y Miriam Hernández, junto al excelente equipo de cocina y sala. Este restaurante es un referente de la zona y de Madrid que se caracteriza por su cocina tradicional, con toques de vanguardia y una decidida apuesta por productos de proximidad. La carta cambia cada temporada según los criterios de la chef y tienen disponible un menù degustación de 14 pases.
Dispone de diferentes comedores y espacios de distintas capacidades, para albergar todo tipo de eventos; desde una reunión de trabajo, hasta un encuentro familiar. Cuenta con dos balcones a la Plaza Mayor y un patio interior, que está climatizado, ideal para estos días de verano.
Comenzamos nuestra experiencia, con una sedosa crema de mantequilla de ajo de chinchón de elaboración propia, y una suave crema de marisco, para entonarnos.
Seguimos con la sugerencia de la semana; una sorprendente Gamba roja al ajillo, sobre un crujiente de ajo, el tartar de la gamba roja con aceite de ajo frito y la cabeza de la misma frita; para chupar o estrujar encima del tartar.
Muy buenas las Ostras con punzu de anís de chinchón y muy sorprendente la versión de las gildas a la madrileña con chicharrón.
Muy sugerente la presentación y sabrosa la Hoja de Parra con carne “así” como le gusta a Miriam Hernandez (carne al ajillo) y sí que está buena.
Buena presentación y suculento bocado el Nigiri de Poza (salsa pimentón y tomate) y caballa.
También es temporada de atún en La Casa del Pregonero, y este Atún rojo ahumado en sarmientos y remolacha asada en tierras de Valdezarza, estaba de campeonato
Otra sorpresa de la Casa; Espaguetis a la carbonara con judías verdes guanchale casero y espuma de requesòn, que sorprenden muy agradablemente.
Impresionante la interpretación castiza y chinchoneta, de este fabuloso lomo de Bacalao Barquero con guiso de manitas a la madrileña.
Recuerdos a la infancia nos llevan estos Filetes rusos (de solomillo) del recetario tradicional de casa de Aya, con las puntas de los solomillos, acompañados con un tomate frito casero y puerros asados con parmentier de tuétano.
IMPRESCINDIBLE dejar sitio para el postre porque es otro de los fuerte de su cocina.
Que bien entraba y que refrescante, este Limoncillo, esta bola de helado de limòn con anís de Chinchón. Estaba para repetir.
Ojito con el tremendo Flan con caramelo de ajo negro con tè matcha y chocolate. Un sabor y textura fuera de lo común, que aún estando el semáforo en rojo y la señal de Food STOP, lo comimos entero.
Una gran experiencia gastronómica, es lo que ofrece La Casa del Pregonero, en pleno corazòn de Chinchón, que ya está inmerso en sus fiestas patronales, así que es la excusa perfecta para ir a visitarla. En fiestas o fines de semana, mejor hacer reserva previa para no quedarse sin mesa en el teléfono 918 94 06 96 o en su web La Casa del Pregonero
